Responsabilidad Social y certificaciones: SA8000

Continuando con la serie de artículos acerca de las certificaciones relacionadas con la Responsabilidad Social Empresarial (RSE), esta vez escogí comentarte acerca de la certificación SA8000 de la que algunos consideran no debería estar incluida en las certificaciones de RSE porque está muy centrada en temas laborales. Sin embargo, si entendemos la RSE de manera holística, esta norma hace un perfecto sentido ya que su principal objetivo es garantizar condiciones laborales seguras, responsables, éticas y justas para los trabajadores de las empresas, y en mi opinión por donde debe comenzar cualquier acción de RSE que se proponga una compañía.

La SA8000 es una certificación voluntaria que fue creada en 1997 por una organización estadounidense llamada Responsabilidad Social Internacional (Social Accountability International – SAI), con la idea de promover ambientes de trabajo más éticos y con mejores condiciones para los trabajadores. La certificación SA8000 se basa en los acuerdos internacionales sobre las condiciones laborales, los cuales incluyen temas como justicia social, los derechos de los trabajadores, entre otros.

A pesar de que esta norma es aplicable a empresa de cualquier sector, la mayor cantidad de organizaciones que la han obtenido trabajan en el área agrícola exportadora de banano, piña, tabaco, vino, frutas enlatadas y café procesado.

La certificación SA8000, establece condiciones mínimas para alcanzar un ambiente de trabajo seguro y saludable; la libertad de asociación y negociación colectiva; y una estrategia empresarial para tratar los aspectos sociales relacionados con el trabajo. Además, contiene reglas vinculadas a la duración de la jornada laboral, los salarios, la lucha contra la discriminación y el trabajo infantil o forzado.

SAI asegura que el sistema SA8000 es una herramienta integral y confiable que garantiza condiciones laborables dignas, porque incluye:

• Un nivel que abarca todos los derechos laborales internacionales ampliamente aceptados.
  Verificación independiente a través de auditores capacitados por SAI lo que garantiza una mayor transparencia en la certificación de cumplimiento.
• Participación de todos los sectores clave, incluidos los trabajadores y los sindicatos, las empresas, los inversores socialmente responsables, organizaciones no gubernamentales y gobierno, en el diseño de la norma, así como en su revisión y mejora continua.
• Información pública: herramientas certificadas de SA8000 se publican en el sitio web de la SAI. Por otra parte, se tiene acceso a casos de éxito y mejores prácticas, a través de las empresas que se unen al nivel dos del Programa de Participación Corporativa SA8000 (CIP), que ponen a disposición pública, informes anuales verificados por SAI.
• Relacionamiento con consumidores e inversores éticos, que a través de la certificación SA8000 pueden identificar empresas que se han comprometido a garantizar los derechos humanos en el lugar de trabajo.

¿Qué contiene la norma?

La SA8000 se basa en las normas laborales internacionales contenidas en los convenios de la OIT, la Declaración Universal de los Derechos Humanos de la ONU y la Convención sobre los Derechos del Niño. En resumen la norma abarca guías para cubrir los siguientes temas:

Trabajo Infantil: Las empresas no utilizarán, ni apoyarán el trabajo infantil. Se definen políticas y procedimientos para la rehabilitación de los niños que se encuentran en esta situación. Establece que las empresas deben proporcionar apoyo financiero para que esos niños asistan a la escuela; y el empleo de los trabajadores jóvenes condicionado de acuerdo a la normativa de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Trabajo forzado y obligatorio: Las empresas no utilizarán, ni auspiciarán el uso de trabajos forzados, ni exigirán a su personal que deje bajo su custodia “depósitos” en dinero, o documentos de identidad, al comenzar la relación laboral con la compañía. No se realizará ninguna retención de sueldos, beneficios, bienes o documentos para obligar al personal a continuar con el trabajo. El personal tendrá el derecho de salir del lugar después del día laborable y tendrá la libertad de dejar su empleo en el momento que lo desee. Las empresas no utilizarán ni apoyarán el tráfico humano.

Salud y seguridad: Las empresas, teniendo en cuenta el conocimiento general existente sobre los riesgos en su industria, así como sobre cualquier otro riesgo especifico inherente a su actividad, establecerán un entorno laboral seguro y saludable, y tomarán medidas adecuadas para prevenir accidentes y lesiones ocasionadas durante la actividad laboral o asociadas a ella, mediante la limitación, hasta donde sea razonablemente práctico, de las causas de riesgo inherentes a dicho entorno laboral. Se deberán eliminar o reducir los riesgos para las madres recientes o que esperan. Se debe proporcionar el equipo de protección personal y la atención médica en caso de una lesión relacionada con el trabajo. Las empresas deberán tener un gerente senior para garantizar la seguridad y la salud laboral, así como establecer un Comité de Seguridad y Salud, integrado por un grupo equilibrado de representantes de la dirección y de los trabajadores. Se deberán establecer programas de entrenamiento regular para el trabajador en materia de salud y seguridad. Por otra parte, las empresas deberán establecer sistemas para detectar las amenazas a la salud y la seguridad, registrar todos los accidentes y garantizar el acceso a baños aseados y en buenas condiciones, agua potable, espacios adecuados para las pausas para comer, lugar para el adecuado almacenamiento de alimentos y dormitorios limpios.

La libertad de asociación y derecho a la negociación colectiva: La compañía respetará el derecho de sus empleados a formar sindicatos, y a ser miembros del sindicato de su elección, así como a negociar colectivamente. En aquellos casos en que la libertad de asociación y el derecho a la negociación colectiva estén restringidos por la ley local, la compañía facilitará instrumentos paralelos para que todo el personal pueda asociarse libremente, y negociar colectivamente. La compañía garantizará que los representantes del personal no sean discriminados, y que dichos representantes tengan acceso a los trabajadores en el lugar de trabajo.

Discriminación: Las empresas no efectuarán, participarán, ni auspiciarán, ninguna forma de discriminación basada en los atributos de raza, casta, origen nacional, religión, discapacidad, género, orientación sexual, participación en sindicatos, afiliación política o edad al contratar, remunerar, entrenar, promocionar, despedir, o jubilar a su personal. Las compañías no interferirán en el ejercicio del derecho de sus empleados a observar sus prácticas religiosas, o en el requerimiento de satisfacer necesidades que vengan determinadas por su raza, casta, origen nacional, religión, discapacidad, género, orientación sexual, participación en un sindicato, o afiliación política. Las empresas  no permitirán comportamientos, incluyendo gestos, lenguaje, y contacto físico, que sean, desde el punto de vista sexual, coercitivos, amenazadores, abusivos, o explotadores.

Disciplina: Las compañías tratarán a todo el personal con dignidad, respeto y tolerancia. No se utilizarán, ni se apoyarán bajo ninguna circunstancia, el uso de castigos corporales, coerción mental o física, ni abusos verbales.

Horas de trabajo: La semana de trabajo normal será como la defina la ley, pero no excederá las 48 horas. Se otorgará al personal por lo menos un día libre en cada período de seis (6) días laborados. Todo trabajo que implique horas extras será reembolsado con paga adicional superior a la de las horas normales, pero bajo ninguna circunstancia deberá exceder 12 horas por empleado por semana. Las horas extras laborales serán voluntarias. En el caso que la compañía sea parte de un contrato colectivo negociado libremente con las organizaciones laborales (como definido por la OIT) y que estas representen una porción significativa de su fuerza laboral, puede requerir horas extras laborales, según el acuerdo, para cumplir con la demanda empresarial de corto plazo.

Compensación: Las empresas garantizarán que los salarios pagados por una semana de trabajo normal cumplan siempre, por lo menos, la normativa legal o las reglas mínimas establecidas por cada industria respectiva, de modo que sean suficientes para cubrir las necesidades básicas del personal y para ofrecer cierta capacidad de gasto discrecional. Las compañías garantizarán que no se realicen deducciones de los salarios por razones disciplinarias. Así mismo, asegurarán que la composición de salarios y beneficios se detalle claramente y de forma habitual a los trabajadores. Las empresas garantizarán igualmente que los salarios y beneficios sean otorgados, cumpliendo rigurosamente con todas las leyes, y que la remuneración se realice de manera conveniente para los trabajadores. Por otra parte, las empresas deben garantizar que no se lleven a cabo prácticas de contratación irregular, o de falsificación de los programas de aprendizaje, dirigidas a evitar el cumplimiento de las obligaciones legales relativas a los derechos laborales y a la seguridad social.

Sistemas de Gestión: las empresas que buscan obtener y mantener la certificación deben ir más allá del simple cumplimiento de integrar la norma en todos sus sistemas y prácticas de gestión.

¿Cómo se puede implementar SA8000?

El SAI ofrece dos opciones para que las empresas puedan certificarse bajo esta norma:

• Certificación SA8000: Las empresas que operan plantas de producción pueden hacerlo a través de auditorías realizadas por alguno los organismos de certificación acreditados. Dado que el sistema SA8000 entró en pleno funcionamiento en 1998, hay organizaciones certificadas en 30 países de los cinco continentes y en 22 industrias. En América Latina hay varias organizaciones que cuentan con la acreditación.
• Programa de participación empresarial SA8000: Las empresas que se centran en la venta de bienes o en una combinación de producción y venta, pueden unirse al Programa de Participación Corporativa SA8000 (CIP por sus siglas en inglés). El CIP es un programa a dos niveles que ayuda a las compañías a evaluar a la empresa en función de la norma SA8000, implementarla e informar públicamente sobre el progreso de implementación.

Los beneficios del CIP incluyen cursos de capacitación para gerentes, proveedores y trabajadores, asistencia técnica en la implementación de la norma SA8000, acceso a una base de datos compartida de los proveedores, y el derecho a usar el SAI y logos SA8000 para comunicarse con las partes interesadas.

Beneficios de la SA8000

Además de promover ambientes de trabajo más dignos y justos,  la aplicación de SA8000 ofrece beneficios para:

Trabajadores y ONG´s:

• Mejora las oportunidades de organizar sindicatos y negociar colectivamente.
• Es una herramienta para educar a los trabajadores acerca de los derechos fundamentales del trabajo.
• Es una oportunidad de trabajar directamente con las empresas en materia de derechos laborales.
• Ayuda a sensibilizar al entorno de los negocios acerca de la importancia y beneficios de asegurar condiciones de trabajo más humanas.

Empresas:

• Los valores de la empresa se materializan en acciones concretas.
• Fortalece la reputación de las compañías.
• Mejora de la contratación, retención y el rendimiento de los empleados.
• Mejora la gerencia y rendimiento de la cadena de suministros

Consumidores y los inversores:

• Transparencia en las decisiones de compra.
• Identificación de los productos realizados de forma ética y de las empresas comprometidas con la producción y el abastecimiento ético.

Esta norma fue revisada recientemente y a partir del próximo año entrarán en vigencia para las certificaciones las mejoras que se le realizaron. El SAI ofrece asistencia técnica para aquellas empresas que desean certificarse y constantemente está documentando casos de estudio en organizaciones que han decidido poner en práctica esta normativa.

En mi opinión la SA8000 puede ser un excelente complemento para cualquier otra certificación que la empresa quiera obtener en materia de RSE. Me parece que puede ser un primer paso, considerando que las otras certificaciones como el GRI y la norma ISO 26000 contienen aspectos relacionados con temas laborales, teniendo cubiertos éstos a través de la SA8000 ya se habrá recorrido un trecho en esta materia.

¿Qué opinas? ¿Te parece útil una certificación como está?

Fuentes: http://www.sa-intl.org/index.cfm?